SANTO DOMINGO, República Dominicana.- El Círculo Dominicano
de Periodistas de Medios Digitales (CIDOPEMD) aclaró este viernes que los
reporteros que acudieron a la rueda de prensa ofrecida por la organización
internacional Human Rights Watch son periodistas y no plomeros de sanitarios
como aseguró el comunicador Ramón Colombo en su columna Fogaraté que publica en elCaribe.
La aclaración se produce luego de que Colombo se expresara este viernes contra los periodistas que cuestionaron
las declaraciones de José Miguel Vivanco, quien vino al país a presentar un
informe donde acusa a la República Dominicana de estar deportando a personas de
ascendencia haitiana, en franca violación a sus derechos humanos.
A través de un comunicado de prensa, la presidenta de CIDOPEMD,
Cristal Acevedo, lamentó que Colombo se refiera en términos despectivos a sus
colegas, a quienes además de plomeros les llamó limpiadores de pozos sépticos,
recogedores de caca de perro y sicarios verbales apandillados.
“Exigimos al señor Colombo pedir disculpas públicas a los
periodistas que acudieron a cubrir la rueda de prensa, por considerar que faltó
el respeto a sus colegas, no solo por emitir juicios amañados, sino por
pronunciarse sobre un hecho que no presenció”, afirmó Acevedo.
La presidenta de CIDOPEMD también aclaró que en ningún
momento los periodistas que cubrieron la rueda de prensa agredieron verbal y
físicamente al señor Vivanco, quien durante el encuentro con los medios no solo
eligió cuáles periodistas tenían derecho a preguntar, sino que solo respondía
las preguntas que a él le interesaba responder.
“Es vergonzoso que en la clase periodística haya personas que
no valoren la labor de informar y pretendan manipular los hechos solo para
generar opinión pública”, consideró Acevedo, al referirse al lamentable escrito
del comunicador.
Se recuerda que el pasado miércoles Vivanco, en nombre de
Human Rigths Watch, ofreció una rueda de prensa para presentar un informe donde
asegura que en el país “hay miles de decenas de dominicanos que podrían ser
deportados” y cuestionó que el Estado exija documentación a las personas en
proceso de regularización migratoria, aseveraciones que provocaron una
avalancha de preguntas, por parte de los periodistas, a quienes Vivanco nunca
pudo presentar pruebas contundentes, más allá de datos que ya habían sido
publicados en medios de comunicación locales.
Columna de Ramón Colombo
Fogaraté
Aclaración pública
Es necesario aclarar ante el mundo que los sujetos que
agredieron verbal y casi físicamente a José Miguel Vivanco, funcionario de
Human Rights Watch, al presentar aquí un informe sobre los dominicanos en
peligro de sufrir deportaciones hacia Haití, no son periodistas, sino plomeros
sanitarios, limpiadores de pozos sépticos, recogedores de caca de perro y
sicarios verbales apandillados (oficio, este último, que se ha acreditado
notablemente en el bajo mundo mediático). Su condición de crápula quedó evidenciada
al ignorar totalmente que el trabajo de un auténtico reportero es preguntar e
informar.
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